Bendiciones espirituales especiales que el Señor da a las personas dignas para su propio beneficio y para que los empleen con el fin de llevar bendiciones a la vida de otros. En DyC 46:11–33, 1 Cor. 12:1–12 y Moro. 10:8–18 se encuentra una descripción de los dones del Espíritu.
> Procurad, pues, los mejores dones, 1 Cor. 12:31 (1 Cor. 14:1).
> Los nefitas recibieron muchos dones del Espíritu, Alma 9:21.
> ¡Ay del que diga que el Señor ya no obra por dones ni por el poder del Espíritu Santo! 3 Ne. 29:6.
> Dios derrama dones sobre los fieles, Morm. 9:7.
> Todos estos dones vienen por el Espíritu de Cristo, Moro. 10:17.
> Hay muchos dones, y a todo hombre le es dado un don por el Espíritu de Dios, DyC 46:11.
> A los líderes de la Iglesia les es concedido discernir los dones del Espíritu, DyC 46:27.
> El Presidente de la Iglesia tiene todos los dones que Dios confiere sobre el cabeza de la Iglesia, DyC 107:91–92.