Aún no llego a comprender cómo ocurrió, si fue real o un sueño. Sólo recuerdo que ya era tarde y estaba en mi sofá preferido con un buen libro en la mano. El cansancio me fue venciendo y empecé a cabecear...
En algún lugar entre la semi-inconsciencia y los sueños, me encontré en aquel inmenso salón, no tenía nada en especial salvo una pared llena de tarjeteros, como los que tienen las grandes bibliotecas. Los ficheros iban del suelo al techo y parecía interminable en ambas direcciones.
El joven tiene la obligación de sentarse en un tronco toda la noche y no puede quitarse la venda de los ojos hasta que los rayos del sol brillan de nuevo al amanecer.
Durante la noche, como es natural, el joven está aterrorizado. Él puede oír toda clase de ruidos: bestias salvajes que rondan a su alrededor, lobos que aúllan… o quizás, hasta algún humano que puede hacerle daño.
Escucha el viento soplar y la hierba crujir, pero debe permanecer sentado estoicamente en el tronco, sin quitarse la venda, ya que esta es la única manera en que puede llegar a ser un hombre ante los ancianos de su tribu.
Finalmente, después de esa horrible noche, aparece el sol y el niño se quita la venda… es entonces cuando descubre a su padre sentado junto a él.
Reflexion:
De esa misma forma, nosotros tampoco estamos solos.
Por eso, cuando vengan los problemas y las sombras nos envuelvan, lo único que tenemos que hacer es confiar en Él, con la seguridad de que algún día vendrá el amanecer, nos quitaremos la venda y lo veremos cara a cara tal cual es.
...Todos los años, en el verano, mamá y papá acompañaban a su hijo en tren hasta la casa de la abuela. Luego, regresaban a casa en el mismo tren al día siguiente.
El niño, cuando creció, les dijo a sus padres:
- Ya soy mayor, ¿qué dicen si este año intento ir solo donde la abuela?
Después de un breve debate, los padres estuvieron de acuerdo. Ahí estaban parados en el andén de la estación, saludando, dando las últimas recomendaciones desde la ventana, mientras él siguia repitiendo:
- ¡Sí, lo sé, lo sé, ya lo han dicho cien veces ...!
El tren estaba a punto de partir y el padre dijo: - Hijo, si de repente te sientes mal o tienes miedo, ¡ésto es para ti! - y puso algo en el bolsillo de su hijo.
El niño estaba solo, sentado en el vagón, sin padres, por primera vez, mirando curioso desde la ventana. Alrededor, extraños empujaban, hacian ruido, entraban al compartimiento, salían, el conductor hacia comentarios sobre el hecho de que estaba solo, alguien incluso lo miró con pesar y de repente el chico se sintió muy incómodo y triste, cada vez más.
Agachó la cabeza, se acurrucó en un rincón del asiento y las lágrimas comenzaron a fluir.
En ese momento recordó que su padre le habia puesto algo en el bolsillo. Con mano temblorosa buscó a tientas y encontró un papel, tenia escrito ésto - Hijo, estoy en el último vagón - ...
Es así como en la vida debemos dejar ir a los hijos, confiando en ellos, pero debemos estar siempre en el último vagón para que no tengan miedo.
Estar cerca, mientras estemos vivos
Cuando miras el reloj, ya es la hora de cenar…
Cuando te das cuenta ya llego el fin de semana…
Cuando miras el almanaque, se termino el mes… y sin darte cuenta llega la nueva Navidad y un nuevo año esta a pocos días…
Cuando somos niños miramos a nuestros abuelos y decimos: cuanto me falta para llegar a su edad… pero cuando llegas y miras para atrás, te preguntas: Como puede ser que los años hayan pasado tan rápido...?
Sin darte cuenta los años pasan y casi siempre dejamos para mañana las cosas que verdaderamente son importantes en la vida…
Pasar tiempo y disfrutar de los hijos, la familia y los amigos…
Muchos gastan sus mejores años de sus vidas detrás de los negocios, el dinero, sin pensar que un día la vida se termina, dejando lo importante para Después.
Si pudiéramos erradicar de nuestro lenguaje la palabra Después, mas tarde o mas adelante, por: ahora no.
Dejamos todo para Después, como si el Después fuese la solución.
Debemos entender que...
El Después, cambia la prioridad…
El Después, te hace perder el encanto…
El Después, te hace llegar tarde…
El Después, hace que los hijos crezcan y no puedas disfrutar…
El Después, hace pasar el tiempo y hace perder la oportunidad de vivir….
El Después, hace que la vida se termine…
Y lo más importante no dejes para después la oportunidad que tienes ahora para decirle a Jesús que sea parte de tu vida, tal vez Después sea demasiado tarde…
El tiempo es como un río, nunca podrás bañarte en la misma agua, porque la corriente se la lleva y jamás podrás recuperarla. ❤ de la red-
Un hombre cargador de agua de India tenía dos grandes vasijas que colgaban a los extremos de un palo y que llevaba encima de los hombros. Una de las vasijas tenía varias grietas, mientras que la otra era perfecta y conservaba todo el agua al final del largo camino a pie desde el arroyo hasta la casa de su patrón; en cambio cuando llegaba, la vasija rota solo tenía la mitad del agua.
Durante dos años completos esto fue así diariamente, desde luego la vasija perfecta estaba muy orgullosa de sus logros, pues se sabía perfecta para los fines para los que fue creada. Pero la pobre vasija agrietada estaba muy avergonzada de su propia imperfección, y se sentía miserable porque solo podía hacer la mitad de todo lo que se suponía que era su obligación.
Cuenta una Historia Tibetana, que un día un viejo sabio preguntó a sus seguidores lo siguiente: – ¿Por que la gente se grita cuando están enojados?
Los hombres pensaron unos momentos:
-Porque perdemos la calma – dijo uno – por eso gritamos.-
-Pero ¿por qué gritar cuando la otra persona está a tu lado? – preguntó el sabio – No es posible hablarle en voz baja? ¿Por qué gritas a una persona cuando estás enojado?
Los hombres dieron algunas otras respuestas pero ninguna de ellas satisfacía al sabio.
Finalmente él explicó:
-Cuando dos personas están enojadas, sus corazones se alejan mucho. Para cubrir esa distancia deben gritar, para poder escucharse. Mientras más enojados estén, más fuerte tendrán que gritar para escucharse uno a otro a través de esa gran distancia.
Luego el sabio continuó:
– ¿Qué sucede cuando dos personas se enamoran? Ellos no se gritan sino que se hablan suavemente ¿por qué? Sus corazones están muy cerca. La distancia entre ellos es muy pequeña.
El sabio sonrió y dijo:
– Cuando se enamoran más aún, qué sucede? No hablan, sólo susurran y se vuelven aun más cerca en su amor. Finalmente no necesitan siquiera susurrar, sólo se miran y eso es todo.
Así es cuan cerca están dos personas cuando se aman...
Luego dijo:
-Cuando discutan no dejen que sus corazones se alejen, no digan palabras que los distancien más, puede llegar un día en que la distancia sea tanta que no encuentren más el camino de regreso...

PAPI, ¿QUE SIGNIFICA SER POBRE?
El empresario, queriendo que su hijo supiera lo que es "ser pobre", lo llevó para que pasara un par de días en la montaña con una familia campesina. Pasaron tres días y dos noches en su modesta vivienda.

- El primer ángel “estatua” era en realidad una veleta.

- Cyrus E. Dallin, el escultor de la primera estatua del ángel Moroni moderno, no era mormón.

- Hay diseños diferentes del ángel Moroni.




- Moroni no fue puesto comúnmente en los templos hasta finales de 1970.

- El Templo de Monticello Utah tenía originalmente un ángel blanco.

- Hay templos SUD que no tienen ángel Moroni.

- Sólo 10 templos tienen al ángel Moroni sosteniendo algo en la mano izquierda

- La mayoría de estatuas del ángel Moroni están hechos de fibra de vidrio ligero y en hojas de oro.
- Siete templos han tenido su ángel Moroni añadido durante los trabajos de renovación.
- No todas las estatuas del ángel Moroni miran al este.
- Ángeles sin un templo.

1.- Nunca desperdicies la oportunidad de expresar tu amor
2.- No te engañes, si algo suena demasiado bueno para ser verdad, probablemente lo es.
3.- Nunca salgas de tu casa durante una discusión con tu esposa.
4.- Recuerda que los ganadores hacen lo que los perdedores no quisieron hacer
5.- Ten cuidado con las personas que te dicen lo honestan que son.
6.- No digas que te falta tiempo, tienes exactamente el mismo numero de horas al día que las que recibieron Helen Keller , Pasteur, Miguel Ángel, La madre Teresa de Calcuta, Leonardo Da Vinci y Albert Einstein.
7.- Cuando pienses en criticar a tus padres, esposa e hijos, muerdete la lengua.
8.- Usa ropa interna audaz, bajo tu atuendo de oficina más solemne.
9.- No esperas a que muera alguien para decirle cuanto lo amabas, díselo hoy que lo tienes cerca.
10.- Vive de tal manera que, cuando tus hijos piensen en justicia, cariño e integridad, piensen en ti.
Autor: H. Jackson Brown Jr.
Colaboración de Magali Sauceda
México
La mujer le preguntó:
¿A cuánto estás vendiendo los huevos?
El viejo vendedor respondió:
- a $1.00 el huevo, Señora.
Ella le dijo:
- tomaré 6 huevos por $5.00 o me iré.
El anciano vendedor respondió: "Esta bien señora, llévelos al precio que usted quiera". Puede ser, que este sea un buen comienzo, porque hoy no he podido vender ni un solo huevo.
Un padre le dijo a su hijo: te graduaste con honores, aquí tienes un auto que adquirí muchos años atrás… tiene más de 50 años de antigüedad.
Pero antes de dártelo, llevalo al lote de autos usados de la ciudad y diles que lo quiero vender y ve cuánto te ofrecen.?
Fue corriendo al patio de la granja a advertir a todos: ¡Hay una ratonera en la casa, una ratonera en la casa!
Cuentan que una vez en la carpintería hubo una extraña asamblea: fue una reunión de herramientas para arreglar sus diferencias. El martillo ejerció la presidencia, pero la asamblea le notificó que tenía que renunciar. ¿La causa? ¡Hacía demasiado ruido! Y, además, se pasaba el tiempo golpeando.
¿Por qué lo llamas desgracia hijo? Respondió el padre. Veremos lo que nos trae el tiempo…
A los pocos días, el caballo regreso acompañado de una preciosa yegua salvaje. ¡Padre, que suerte! Exclamo el muchacho. Nuestro caballo ha traído otro caballo más.
Un anciano maestro estaba ya cansado de escuchar las constantes quejas de su discípulo, así que pensó que debía enseñarle algo que le hiciera recapacitar.
El otro hombre tenía que estar tumbado todo el tiempo. Los dos se hablaban mucho. De sus mujeres y familiares, de sus casas, trabajos, el servicio militar, dónde habían estado de vacaciones.